Guerrilla de Frontline en Indonesia.

Dejando atrás el asunto de los elevadores, aunque aún en centros comerciales, encontré esta buena idea para la marca Frontline, un producto para deshacerse de las pulgas de las mascotas caseras. El concepto está genial: A manera de ambient, se instala una impresión de gran formato en el nivel inferior del centro comercial, para que las personas terminen convirtiéndose en parte del anuncio:

Me encanta el alcance que puede tener esta acción. Recuerdo que un amigo me comentaba “Pues no es tan barato como uno pudiera creer”, pero sigue siendo mucho menos costoso que mantener un spot de televisión que compite contra varios otros anuncios.

Sobre todo, veo como principal ventaja que esto es aplicable a puntos de venta. Hoy en día, cada vez hay más centros comerciales que albergan una tienda de autoservicio (y casi todas tienen una tienda de mascotas, en donde la instalación cobra mayor sentido). La agencia responsable es Saatchi & Saatchi, Jakarta.